2.- La historia de El Diablo


Alguna vez escuché que hay quienes nacen con una estrella de buena suerte y otros con mala suerte, creo que yo soy de los segundos porque mi vida es una cadena de hechos desafortunados... mi nombre de pila es Martín, pero hoy todos me conocen como el "Diablo"...
Nací en un pueblo lleno de prejuicios por eso desde niño fui señalado por no tener un padre
Nací en un pueblo lleno de prejuicios por eso desde niño fui señalado por no tener un padre... mi madre se metió con un tipo que sólo la embarazó dejándola abandonada a su suerte... al no tener una figura paterna, mi madre lo era todo para mí a pesar que ella no era cariñosa conmigo, por el contrario a veces sentía que no me quería... decía que físicamente no me parecía nada a ella, así que supongo que me parezco a mi padre y por esa razón me despreciaba...
Mis primeros años los pasé en las calles aprendiendo las mañas de un niño que no tiene familia y es que mi madre dormía por las mañanas, ya que trabajaba como enfermera por las noches... todos los días se despertaba como a las 3 de la tarde para comer, bañarse, maquillarse e irse alrededor de las 7 de la noche a su trabajo...
todos los días se despertaba como a las 3 de la tarde para comer, bañarse, maquillarse e irse alrededor de las 7 de la noche a su trabajo
Cuando tenía 11 años las dudas sobre el trabajo de mi madre comenzaron a surgir... ¿por qué si era enfermera tenía que arreglarse y maquillarse tanto?... y es que a pesar de tener más de 40 años mi madre tenía un buen cuerpo y aparentaba menos edad...
Martín: oye mamá, por qué te maquillas tanto, ¿así van todas las enfermeras?
Madre: sí, al encargado del sanatorio no le gusta que seamos fodongas...
Martín: es que doña Charo también es enfermera y ella no se arregla tanto...
Madre: ay Martín, ya deja de molestarme, ultimadamente es mi problema... mejor vete a jugar o haz algo, pero déjame en paz...
Salí de mi casa y me fui al callejón, donde la mayoría de los muchachos de mi barrio jugaban futbol...
Uno de los chicos gritó: ay viene el "Diablo", que juegue con nosotros...
Para ese entonces, yo ya me había ganado el apodo del "Diablo" y es que siempre he sido bueno con los puños, me peleaba con el que se me pusiera enfrente, incluso con mayores que yo... muchos decían que no le tenía miedo a nada, ni al mismo diablo, de ahí mi mote...
Chico: Oye Diablo, éntrale al juego, estamos contra unos chavos de secundaria y nos están dando en la madre, haznos el paro...
Sin muchas ganas, le entré al juego y en cada patada descargaba mi ira... los tipos de secundaria estaban que ardían de coraje, pues les estábamos dando en la torre... hubiera sido un día normal si mi madre no se hubiera aparecido para llamarme...
Martín: ¿qué haces aquí mamá?
Madre: eres un despistado, te saliste sin la llave... no sé cómo ibas entrar a la casa...
Mi madre me dio la llave y se dio la vuelta para irse a su trabajo... de pronto, varios tipos del equipo rival comenzaron a chiflarle y a decirle cosas que me ofendieron...
"Mamacita, dame mi leche.... con esa mamá yo quiero que me den pecho... que mami tan buena"
Furioso grité: hey ya párenle... no se pasen de vergas... es mi jefa...
Uno de los más grandes dijo: pues que culpa tenemos que tu mamá esté tan buena...
Martín: chinga tu madre... vuelve a repetir lo que dijiste y te tumbo todos los dientes...
Muchacho: tranquilo chavo... ya deberías estar acostumbrado a que los hombres veamos así a tu jefa, después de todo en su trabajo le han de decir cosas peores...
Martín: ¿en su trabajo? ¿de qué hablas? mi madre es enfermera...
El tipo y sus amigos comenzaron a reír y yo con el rostro lleno de ira grité: de qué se ríen pendejos...
Muchacho: pues de que seas tan ingenuo... de vicio te haces llamar "Diablo"... tu mami no es ninguna enfermera, ella trabaja de puta en el cabaret del pueblo...
La palabras del tipo hicieron que me lanzara sobre él dándole de golpes y exigiendo que se retractara de lo que decía... tres de sus amigos se metieron a defenderlo, pero yo me daba abasto con todos, por algo me llamaban "Diablo" y se los demostré...
Mientras descargaba mi ira contra el que había "difamado" a mi madre, le pedía: di que lo que dijiste es mentira, dilo o te mato...
Muchacho: te juro que es cierto, compruébalo tú mismo yendo al cabaret y sabrás la verdad...
Con el rostro desfigurado por los golpes, dejé al tipo y me fui corriendo del callejón...
No sabía qué hacer... no quería creer que mi madre era lo que me decían... caminé sin rumbo hasta que eran más de las 10 de la noche y sin saber cómo llegué hasta la puerta del cabaret del pueblo... obviamente no me dejarían entrar por lo que me las arreglé para infiltrarme...
Fue la primera vez que entré a un antro de vicio y la primera vez que respiré el aroma a tabaco y alcohol, pero todo eso no fue nada con la grotesca imagen que vi... en un rincón de esa cantina mi madre era devorada por los labios de un hombre con sobrepeso, mientras que otro tocaba su cuerpo vulgarmente y uno más disfrutaba del asqueroso espectáculo mientras bebía... sentí que la sangre hirvió en mis venas y como si el mismo demonio se apoderara de mí me fui encima del tipo que la besaba...
El hombre gordo cayó por el impacto en el rostro y mi madre muy asustada gritó: Martín ¿qué haces aquí?
Con lágrimas en los ojos dije: ¿así que este es el hospital en el que trabajas? por eso te maquillabas tanto, porque realmente eres una puta...
Mi madre estampó su mano en mi rostro: cállate, no tienes derecho a juzgarme, porque gracias a este trabajo haz tragado toda tu vida...
Martín: pues preferiría morir de hambre antes que vivir esto...
Madre: yo también preferiría que estuvieras muerto, me arruinaste la vida... lárgate de aquí...
Martín: no volverás a verme nunca, me iré de la casa...
Iba a irme del lugar cuando el gordo que golpeé me detuvo del brazo y me pegó en el rostro: esta me la pagas muchachito, a mí nadie me pega...
Lleno de furia comencé a golpear al tipo, que se sorprendió por mi fuerza, pues aunque sólo era un preadolescente sabía defenderme muy bien... ambos caímos sobre la mesa y las botellas de licor se rompieron... en un acto desesperado, el tipo agarró una botella rota e intentó golpearme con ella, pero en un desafortunado movimiento fui yo quien terminó clavándole la botella en la yugular...
Un río de sangre llenó esa cantina, el tipo murió instantáneamente y yo fui detenido... nadie me defendió, creo que hasta mi madre declaró en mi contra, así que al tener 11 años fui enviado a la correccional de menores... me condenaron a 10 años de prisión...
En el tutelar de menores seguí siendo el mismo "Diablo" y aún peor, aprendí a fumar, a tomar alcohol y a muchas otras mañas... la vida no me importaba por eso me enfrascaba en peleas sin sentido llegando a ser respetado por todos... cumplí los 18 años y fui enviado a un penal para adultos, ahí las cosas serían diferentes, me encontré con tipos mucho más grandes que yo y aún más viciados...
Pero yo tampoco era el mismo, ya no era un niño sino un hombre...
En la primera semana en la cárcel fui llamado por el "Caimán", él era uno de los líderes de la prisión
En la primera semana en la cárcel fui llamado por el "Caimán", él era uno de los líderes de la prisión...
Caimán: ¿así que te llaman Diablo? pues quiero saber si ese nombre te queda o no...
Diablo: mire, yo no tengo ganas de broncas... me falta poco para salir y prefiero llevármela tranquilo... sólo no se metan conmigo y ya...
Caimán: ¿tranquilo? jajajajaja... no hay tranquilidad en la cárcel... aquí es la ley de la selva, así que tienes de dos sopas, o te me unes o estás contra mí... sólo te digo que la segunda opción es la que menos tranquilidad te dará, porque me encargaré que vivas un infierno si es que llegas a salir con vida de aquí...
Nuevamente, la vida me ponía en una situación difícil, pero para un hombre que como yo no tiene nada que perder, decidí que lucharía por lo único que tenía, mi vida...
Diablo: está bien... estoy contigo...
Caimán: no es así de fácil chavo... primero tendrás que demostrarme de qué estás hecho... aquí nos gustan las luchas y te enfrentarás a uno de mis hombres, si le ganas serás de los míos y si no, serás escoria... ¿aceptas?
No tuve más remedio que entrarle a la pelea y en la noche varios se habían reunido para ver la lucha, en el lugar habían hasta guardias... la corrupción imperaba en ese lugar...
Apareció, el tipo con el que pelearía... le llamaban el "Güero", pues era un chavo de mi edad, pero rubio y de ojos verdes, musculoso y de rostro con facciones finas...
le llamaban el "Güero", pues era un chavo de mi edad, pero rubio y de ojos verdes, musculoso y de rostro con facciones finas
Caimán: muy bien, estos dos se van a pelear en estilo libre, todo está permitido... el premio para el nuevo es pertenecer a mi banda...
Uno de los espectadores gritó: y el Güero ¿qué apuesta?...
El Caimán sonrió maquiavélicamente y contestó: él apuesta... las nalgas... si pierde, el Diablo se lo chinga frente a todos...
Los presos comenzaron a aplaudir y yo me sorprendí... el rostro del Güero también revelaba sorpresa, pero tenía que cumplir...
La pelea inició y aunque el Güero era bueno para los golpes no se podía comparar con alguien que creció en las calles... la lucha no pasó de los 10 minutos y terminé sometiendo a mi rival ante el chiflido de todos...
El Caimán me alzó la mano y gritó: así se hace Diablo, eres bueno para los madrazos y ya estás dentro de mi grupo...
El público gritó: ahora que el Güero pague... sííííííí...
Caimán: ni modos güerito, te toca empinarte pa que te rompan el culo...
Yo dije: no Caimán, me niego... yo no soy maricón... no quiero clavármelo...
Caimán: ni madres Diablo, aquí no te hagas el machito... en la cárcel hay quienes dan y a otros que les dan... si no te coges al Güero entenderé que te gusta que te den y entonces él te cogerá a ti... tú decides...
A pesar de ya haber tenido sexo con mujeres, hasta ese momento no lo había hecho con ningún hombre... vi cómo el Güero se despojó de su ropa quedando totalmente desnudo frente a todos que le gritaban palabras vulgares...
Nuevamente, tuve que hacer lo necesario para sobrevivir en un mundo lleno de vicios... me desnudé y decidí joderme al Güero...
El Caimán interrumpió: hey ya que tienes buena verga que sea el Güero que se ensarte solito pa que no le duela tanto
El Caimán interrumpió: hey ya que tienes buena verga que sea el Güero que se ensarte solito pa que no le duela tanto...
Todos rieron: jajajajajajajaja...
Yo me acosté en el suelo con mi verga parada en dirección al techo... el Güero con el rostro enrojecido por la humillación se acercó y cerrando los ojos se fue sentando en mi miembro...
Sentí cómo las nalgas blancas del Güero se iban abriendo para darle paso a mi verga... la sensación que tuve en ese momento fue deliciosa...
El Güero comenzó a sentir cómo el pedazo de carne dura que me pertenecía se adentraba en su cuerpo
El Güero comenzó a sentir cómo el pedazo de carne dura que me pertenecía se adentraba en su cuerpo... tenía las nalgas abiertas a más no poder y mi verga se enterraba en su culo sin piedad abriéndole el músculo del ano...
mi espada resbalaba entre las paredes de su recto deslizándose hacia sus entrañas, su culo se iba hinchando de tanta carne que le estaba metiendo
...mi espada resbalaba entre las paredes de su recto deslizándose hacia sus entrañas, su culo se iba hinchando de tanta carne que le estaba metiendo...
Cuando estaba totalmente empalado, los gritos de los espectadores hicieron que me hirviera la sangre y poseído por el placer de coger a un buen culo, empujé al Güero haciendo que este cayera al suelo y yo me levanté para follarlo como se debe
Cuando estaba totalmente empalado, los gritos de los espectadores hicieron que me hirviera la sangre y poseído por el placer de coger a un buen culo, empujé al Güero haciendo que este cayera al suelo y yo me levanté para follarlo como se debe...
Todos gritaron emocionados y yo sin esperar me enterré en el Güero, quien sentía nuevamente su culo invadido por mi verga, que ahora se movía como si tuviera vida propia viajando cada vez más adentro de su ser.
Todos gritaron emocionados y yo sin esperar me enterré en el Güero, quien sentía nuevamente su culo invadido por mi verga, que ahora se movía como si tuviera vida propia viajando cada vez más adentro de su ser
Caimán: eso cabrón... chingátelo como los machos...
Público: "déjalo sin caminar" "hazlo tu perra" "que sepa quién es el macho" "embarázale los intestinos"...
Las palabras de todos me encendían aún más así como ver al Güero con lágrimas en los ojos y mordiéndose los labios para no gemir y demostrar que también lo estaba disfrutando...
Las palabras de todos me encendían aún más así como ver al Güero con lágrimas en los ojos y mordiéndose los labios para no gemir y demostrar que también lo estaba disfrutando
Fue en ese momento que aprendí el placer de coger culos... sin poder aguantar más me corrí llenando el interior del Güero con mi leche...
todos comenzaron a chiflar al ver cómo del culo de mi víctima escurría mi semen
todos comenzaron a chiflar al ver cómo del culo de mi víctima escurría mi semen... yo me sentía totalmente liberado y satisfecho... me sentía como un rey vitoreado por todos y sonría al ver al Güero sometido por mí y con el culo roto... no había problema en correrme dentro de él, después de todo no se podía embarazar... los hombres no se embarazan, al menos eso creía...
Con 21 años salí de la cárcel y sin saber a dónde dirigirme fui a dar al pueblo donde nací... me enteré que mi madre se había fugado con un hombre fuereño, nadie sabía nada de ella... yo estaba solo como siempre... a pesar de todo decidí quedarme en el lugar...
Con menos de una semana en el pueblo y ya me había metido en broncas... una tipa me quedó viendo feo, le dije sus verdades y el novio salió a defenderla... pobre no sabe con quién se estaba metiendo porque le di hasta por debajo de la lengua y lo mandé al hospital... rápidamente se corrió el rumor que el "Diablo" estaba nuevamente en el pueblo... algunos recordaban y conocían mi historia, aunque la habían distorsionado haciéndome quedar como un verdadero demonio...
Un día después, sólo había desayunado y decidí ponerme a beber alcohol... como no tenía a dónde ir me metí en una casa en construcción, cuyas obras estaban detenidas quién sabe por qué... el caso es que me eché a beber mientras desde una rendija veía a la gente pasar... eran más de las 3 de la tarde cuando vi una figura que llamó mi atención...
era un chico lindo, delgado y bastante afeminado, debía tener unos 15 años de edad, caminaba con prisa por lo que apenas lo vi bien aunque lo que más me llamó la atención fueron sus nalgas
...era un chico lindo, delgado y bastante afeminado, debía tener unos 15 años de edad, caminaba con prisa por lo que apenas lo vi bien aunque lo que más me llamó la atención fueron sus nalgas... estaban redonditas y bien carnosas... no pude evitar que mi verga despertara y recordé que tenía como un mes sin metérsela a nadie...
Continúe bebiendo y la noche ya había caído, el alcohol me tenía aún más caliente... de pronto vi que el chico de la tarde venía de regreso y pensé que si era maricón podría servirme para saciar mis ganas... me levanté sigilosamente y cuando el chico pasó cerca de la construcción lo jalé hacia adentro y pude apreciarlo bien...
Era una verdadera delicia, de cerca su cuerpo era como el de una mujer, delgado y con curvas... y las nalgas eran mejor de lo que esperaba, sin duda me darían mucho placer...
No esperaba que el chico se defendiera e intentó darme una bofetada, pero lo detuve y le dije: ni lo creas, tú no me vas a pegar, nadie le toca un pelo al "Diablo" y menos un putito como tú...
Arrojé al chico al suelo y me desabroché la camisa, sentía mi pecho arder... sin esperar más le rompí su camisa y lo despojé de sus pantalones...
Él sólo pataleaba y gritaba: nooooo, por favor nooooo
Saqué un pañuelo y lo metí en su boca para impedir que siguiera gritando... al verlo totalmente desnudo sentí un dolor en mi entrepierna, mi verga luchaba por salir de mis pantalones para adentrarse en esa cueva que se veía como nueva... ¿acaso ese chico era virgen?, pensé...
Diablo: eres un bombón delicioso... espero ser yo el que te estrene...
Metí un dedo en el agujero del muchachito y comprobé que era virgencito... yo sería el primer macho en su vida, no podría olvidarme nunca...
Sus gemidos me excitaban aún más... y luego de dedearlo por un rato, me desnudé totalmente...
mi miembro ya estaba listo para la batalla escurriendo líquido preseminal
...mi miembro ya estaba listo para la batalla escurriendo líquido preseminal... sonreí al ver el rostro de terror del chico...
Me coloqué entre sus piernas y sin aguantar más mi excitación, me enterré dentro de él... sentí lleno de satisfacción cómo mi ariete de carne rompía cada uno de los pliegues virginales de ese adolescente que se retorcía debajo de mí... no tuve piedad y envainé mi espada hasta que mis huevos chocaron con esas carnosas nalguitas...
no tuve piedad y envainé mi espada hasta que mis huevos chocaron con esas carnosas nalguitas
Diablo: ya te tengo bien clavado... ya no eres virgen chiquito... yo me robé tu maravilloso tesoro, jajajaja...
Saqué mi verga de ese delicioso agujero y la vi llena de sangre, lo había desflorado... el putito me había regalado su primera vez... en esos momentos recordé cuando me chingué al Güero, su culo no estaba tan apretado y es que ya le había servido de puta al Caimán... después me jodí a muchos más, pero ninguno me apretaba tanto como este delicioso adolescente...
Diablo: qué rico estás... sabes a limpio, a carne fresca, eres de lo mejor que me he comido...
Volví a ensartarlo y a partir de ese instante no tuve piedad, lo embestí salvajemente, mientras que en mi borrachera escuchaba las voces de los presos animándome a romper las entrañas de mi putito...
"Dale duro" "que no vuelva a caminar", esas palabras resonaban en mi mente...
"Dale duro" "que no vuelva a caminar", esas palabras resonaban en mi mente
Yo sólo le decía: querías ser mujer, pues aguántate como una hembra...
Él comenzó a rasguñarme queriendo hacerme daño, pero me provocaba más placer, además sé que él también comenzó a disfrutar... su cuerpo caliente me lo decía y yo no estaba dispuesto a darle tregua...
Diablo: te lo haré más duro para que entiendas que tienes que respetar a tu macho... tú sólo eres un putito, sólo eso...
El mariquita escupió el pañuelo y comenzó a gemir excitándome más: ah ah ah ah ah ah ah...
Diablo: gimes como una puta y tu culo me aprieta chingón...
No sé por qué, pero el rostro de dolor del chico y sus lágrimas provocaron que le diera un beso en la boca, lleno de pasión... toda mi lengua se introdujo dentro de él violando también su cavidad bucal...
Finalmente, no aguanté más y comencé a temblar para correrme dentro de mi víctima
Finalmente, no aguanté más y comencé a temblar para correrme dentro de mi víctima... descargué chorros de leche, pues no me había desfogado en días y por fin había encontrado el recipiente perfecto... un culo de campeonato...
Me dejé caer sobre él y mientras mi verga se seguía deslechando manoseaba ese cuerpecito exvirginal... después salí de su interior y disfruté ver su culo sangrando y escurriendo semen, mi semen... pensé que si fuera mujer le hubiera hecho gemelos por la cantidad de leche que le deposité... pero los hombres no se pueden embarazar...
Me levanté para ir a orinar y luego de hacerlo me vestí rápidamente
Me levanté para ir a orinar y luego de hacerlo me vestí rápidamente...
Diablo: ya estoy bien desfogado, me siento como nuevo, ahora tengo hambre iré a conseguir algo... nos vemos primor, eres una ricura... quizás nos volvamos a encontrar y si no pues estoy seguro que no me olvidarás, jajajajaja...
Lo último que vi fue a un hermoso adolescente tirado en el suelo como una muñeca de trapo, usado y estrenado por mí... era un maricón y seguro yo sólo sería el primero de muchos más hombres en su vida...
Salí de la casa en construcción y caminé sin rumbo...
No tenía a dónde ir hasta que llegué hasta aquel cabaret en el que había encontrado a mi madre trabajando...
Pensé en entrar, pero decidí no hacerlo, quizás si tampoco hubiera entrado hace diez años mi vida hubiera sido muy diferente, pero de qué sirve pensar en el hubiera... hoy soy el "Diablo", un exconvicto, un paria de la sociedad... pensé en qué debía hacer, ¿irme del pueblo o quedarme?... cualquiera opción daba lo mismo, no tenía nada ni a nadie...
Seguí mi camino errante y sin saber que esa noche había sembrado una semilla que cambiaría totalmente mi vida...


Seguí mi camino errante y sin saber que esa noche había sembrado una semilla que cambiaría totalmente mi vida

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