1.- La historia de José María

Mi nombre es José María Reyes, mi historia es un tanto extraña, pues aunque soy hombre desde que tengo uso de razón me he sentido como una mujer...

Nací en un pueblo con costumbres machistas y tradicionales... mis padres fallecieron en un accidente cuando tenía un año, por lo que sólo los conozco por fotos, no tengo ningún recuerdo de ellos... quien se encargó de criarme es mi abuela Antonia, "mamá Tony" como yo le digo...

Como les contaba desde que era niño siempre creí que era niña... cuando entré al preescolar recuerdo que el primer día de clases la maestra pidió que nos dividiéramos en dos filas, una de niños y otra de niñas... yo ingenuamente me paré junto a las niñas provocando que todos se rieran... fue la primera vez que me di cuenta que algo no estaba bien...
En el recreo quería juntarme a jugar con las niñas, quienes llevaban muñecas, pero ellas me corrían diciendo que yo era un niño porque tenía "pajarito"... no entendía a que se referían, pues en mi inocencia creía que mi cuerpo era como el de una chica...
Obviamente, la maestra se dio cuenta de mi "extraño" comportamiento y habló con mi abuela, quien al llegar a casa me explicó las diferencias entre un chico y una chica...
JM: pero mamá Tony... yo soy una niña ¿verdad?
Abuela: no hijo... tú eres un niño... entiéndelo bien, eres niño y debes comportarte como un hombrecito o todos se van a burlar de ti...
JM: pero yo no quiero ser niño... yo quiero...
A: no digas más Jose María o me voy a enojar contigo...
Tuve que aceptar lo que mi abuela decía aunque yo creía que ella estaba confundida...

Los años pasaron y cuando ya estaba en la primaria, los niños de mi escuela comenzaron a burlarse de mí, pues aunque intentaba cambiar mi forma de ser, algo en mi interior me hacía actuar como una chica aunque fuera un chico...
Al ser un pueblo, todos comenzaron a alejarse de mí considerándome raro y me empezaron a llamar "José Mujer" en vez de José María... todos me lo decían para ofenderme, pero a mí hasta me gustaba, porque de esa forma reconocía la femineidad que en mi interior guardaba y que debía reprimir por el qué dirán...

Fue un día de clases, cuando estaba en cuarto grado de primaria cuando mi vida dio un vuelco... yo estaba sentado solo viendo a los chicos de quinto grado jugar futbol cuando el balón rodó a mis pies... me acerqué a levantarlo y uno de los niños gritó...
Niño: hey José Mujer suelta el balón... sólo los machos jugamos futbol y tú eres un maricón... déjalo no nos vayas a contagiar...
JM: disculpa... yo sólo quería...
El chico me arrebató el balón y me tomó de la camisa mirándome amenazadoramente...
Niño: no vuelvas a tocar mi pelota pinche maricón o te parto la madre ¿entiendes?
Yo no sabía qué hacer ni qué decir, sólo tenía miedo cuando como un príncipe, un niño mayor que yo empujó al abusivo...
"Príncipe": suéltalo... eres un abusivo... él es menor que tú...
Niño malo: y tú quién te crees para empujarme pendejo...
Ambos estuvieron a punto de irse a los golpes... cuando el resto de los amigos del dueño del balón lo detuvieron...
Amigo: hey, no te metas con ese chavo...
Niño malo: y por qué no... quién es ese pendejo...
Amigo: es Arturo Xicoténcatl, el hijo del dueño del rancho más importante de aquí... mejor no te busques pleitos...
Yo no entendí por qué, pero el niño grosero no dijo más y se fue a continuar jugando con el resto de sus compañeros... me acerqué a mi "príncipe" defensor... y le digo príncipe porque eso parecía, era un niño tres años mayor que yo, de cabello lacio y rubio, ojos verdes y piel blanca, era guapísimo, al verlo sentí que algo revoloteaba en mi estómago y con voz temblorosa le dije...
JM: gracias... yo...
A: no tienes nada qué agradecerme... ese tipo es un abusivo... hola, yo me llamo Arturo y tú...
JM: José María... no te había visto en la escuela ¿por qué?
A: porque acabo de llegar, estudiaba en la ciudad, pero mi papá enfermó y tuve que venir a este pueblo...
JM: ya veo, siento que te hayas buscado problemas por mi culpa...
A: no te preocupes...
Arturo sonrió y yo sentí algo muy cálido en mi corazón...

A partir de ese día comenzamos a llevarnos muy bien... poco después me enteré quiénes eran sus padres, también me di cuenta que era un chico solitario... no le gustaba hablar con los demás, pero sí conmigo...
Muchas veces al salir de la escuela, él y yo íbamos al río cercano para jugar... yo cada vez me portaba más como una chica, pero a él eso no le importaba, al contrario, me trataba con delicadeza y eso a mí me encantaba...

Los años continuaron pasando y con los años el cuerpo cambia y el mío también, pero a diferencia de un chico normal que presenta ensanchamiento de espalda y musculatura, a mí se me definían más las curvas, mi cintura era delgada, mis nalgas se volvieron más esponjosas y mi silueta se asemejaba más al de una chica... todo sumado a mi comportamiento femenino...
Para mi abuela, esto no pasó desapercibido y cuando tenía 13 años me llevó con el médico, quien después de hacerme varios estudios le dio a mamá Tony una extraña noticia...
Doctor: su nieto está completamente sano señora...
Abuela: pero es que yo siento que es extraño su comportamiento y su crecimiento corporal...
Doctor: su nieto está bien de salud, pero presenta un caso de hermafroditismo...
A: ¿qué es eso?
Doctor: en términos sencillos, su nieto tiene la apariencia externa de un hombre, pero su interior es el de una mujer...
A: pero ¿eso es posible?
Doctor: lo es, es un caso muy extraño, pero su nieto no cuenta con el aparato reproductor femenino, aunque todos sus órganos internos sí lo son, por eso su desarrollo está siendo equiparable al de una chica...
La noticia impactó tanto a mi abuela que decidió no decirme nada... yo me enteraría años después... entre tanto mi vida siguió normal... yendo a la secundaria y compartiendo momentos con Arturo...
Pero algo cambió, los chicos del pueblo que antes me molestaban, ahora eran más acosadores y me gritaban cosas feas...
"qué ricas nalgas, José Mujer, a ver cuándo las prestas"... "en esa cola sí me formo"... "si quieres ser hembrita, yo te hago el favor"...
En más de una ocasión, Arturo se peleó por mí defendiéndome... muchos creían que él era mi novio, pero sólo éramos amigos, aunque yo comenzaba a sentir algo más... a Arturo parecía no importarle lo que la gente del pueblo dijera por juntarse conmigo, para mí él era todo un príncipe y yo deseaba ser su princesa...

Yo ya tenía 15 años de edad y Arturo 18... Arturo se había convertido en un hombre joven guapísimo y musculoso y yo, bueno era una señorita atrapada en el cuerpo de un adolescente...

...éramos los mejores amigos y él constantemente visitaba mi casa...

Fue una tarde cuando me dio una terrible noticia...
A: mi madre quiere que me vaya a estudiar a la ciudad una carrera y voy hacerlo en un mes cuando termine la preparatoria...
Sentí un golpe en mi corazón y con lágrimas en los ojos le dije: ¿ya no vas a regresar?
A: sí, volveré cuando termine la carrera... tengo que hacerme cargo del rancho...
JM: ¿cuándo será eso?
A: en cinco años estaré de vuelta...
Las lágrimas rodaron por mi mejilla y Arturo las limpió dándome un abrazo...
Ninguno dijo nada más... sólo hubo una promesa de Arturo: te prometo que volveré...

El mes se pasó volando y el día de la partida de Arturo yo estaba muy nervioso... estaba comiendo con mi abuela, quien me contó lo ocurrido a una vecina...
Abuela: imagínate que el hijo de Chonita está hospitalizado por pelearse con el "Diablo"...
JM: ¿con quién?
A: con el "Diablo", así le dicen a un delincuente que anda rondando por acá... ya te imaginarás cómo ha de ser para que le apoden así...
JM: y de dónde salió ese tal "Diablo"...
A: pues según dicen es del pueblo, pero que estaba preso por haber matado a alguien...
JM: pues cuántos años tiene...
A: creo que 19 ó 20...
JM: pensé que era mayor... pero por qué golpeó al hijo de Chonita, él es un muchacho tranquilo...
A: pues porque iba caminando con su novia y ese "Diablo" comenzó a molestar a la chica y él la defendió... pero el muy maldito le dio una golpiza que lo dejaron como santo Cristo...
JM: qué horror abuela... ojalá y ese "Diablo" se vaya del pueblo...
A: Dios quiera hijo, antes que haga daño a algún inocente...
Yo aún no sabía la desgracia que me esperaba, en esos momentos sólo podía pensar en Arturo... decidí ir al rancho para verlo por última vez...

Arturo se sorprendió al verme y me dijo: pensé que ya no te vería, ayer nos despedimos...
JM: es que no quiero que te vayas...
A: por favor José María, no me voy para siempre... ya te dije que volveré...
JM: perdóname soy un tonto... sólo estoy haciendo el ridículo... mejor me voy...
Cuando iba a salir, Arturo me detuvo del brazo y mirándome a los ojos me dijo: en verdad voy a volver...
Noté que los ojos de Arturo se clavaron en todo mi cuerpo y yo me sentí preso de su mirada... de pronto no sé cómo, pero Arturo me besó en los labios de manera inesperada...
El contacto entre nuestros labios hizo que todo mi cuerpo se erizara... nunca alguien me había hecho sentir así... y tampoco había hecho esto con Arturo, él y yo éramos sólo amigos...
El aliento cálido de mi príncipe llenó mi garganta y correspondí torpemente a esa caricia...

Cuando Arturo dejó mis labios, yo me llené de rubor en toda la cara y él con una sonrisa seductora dijo: para que me recuerdes en lo que regreso... espérame por favor...
Eso fue todo lo que escuché, porque de inmediato salí corriendo del rancho... mi corazón latía al mil por ciento, pero la calidez de ese beso no lo olvidaría nunca...

El rancho de Arturo está lejos de mi casa, por lo que las sombras de la noche cayeron y yo caminaba apresuradamente para llegar a cenar... mi corazón seguía rebosante de alegría por ese beso, para mí las palabras de Arturo habían sido una declaración de amor y por supuesto que esperaría a mi príncipe... le sería fiel esperándolo hasta que volviera...
Lejos estaba de imaginar que mientras caminaba desde una casa en construcción, una mirada de lobo me acechaba y cuando pasé por ese lugar sólo sentí como era jalado hacia el interior... sin tiempo de reaccionar, me vi de pronto entre las cuatro paredes de ese sucio lugar siendo arrinconado por un hombre mucho más corpulento y alto que yo...
Con voz temblorosa, dije: ¿Quién es usted?
Desconocido: shhhhh... no vayas a gritar...
La voz del desconocido era gruesa y rasposa, mi cuerpo se erizó al escucharlo...
JM: ¿qué es lo que quiere?
Desconocido: pasar un buen rato y tú me vas a servir...
JM: no lo entiendo...
Desconocido: es fácil muñequito, ando caliente y no he podido desfogarme... tu cuerpo me va servir para deslecharme...
Ante las palabras vulgares de ese hombre, intenté escapar, pero el desconocido me detuvo por la cintura y me dijo: ni lo pienses chiquito, de aquí no te vas sin que antes me hayas servido como puta...
Llorando supliqué: no señor, por favor usted me confunde, yo no soy eso que dice...
Acercando su rostro al mío, el hombre contestó: eres un maricón y todos los maricones son unas putas...
Yo intenté darle una bofetada, pero este me detuvo y dijo: ni lo creas, tú no me vas a pegar, nadie le toca un pelo al "Diablo" y menos un putito como tú...
Hasta ese momento, entendí que frente a mí estaba el "Diablo", el tipo del que mi abuela me había hablado en la tarde... un rayo de la luna me permitió apreciarlo tal cual era, un hombre con piel tostada, cabello oscuro, musculoso, cejas gruesas, ojos negros y con una mirada hosca...

JM: no me haga daño por favor...
Diablo: suplica lo que quieras de aquí no te me vas vivo...
Nuevamente intenté gritar, pero el hombre me dio una bofetada que me arrojó al suelo... Caí entre la grava que había en el lugar y vi cómo el hombre sonrió de manera maliciosa y dijo: que buen banquete me voy a dar...
El Diablo desabrochó su camisa dejando ver un pecho esculpido y un abdomen lleno de cuadros... se desabrochó su pantalón y antes que se lo quitara intenté huir nuevamente...
El Diablo se arrojó sobre mí y aprisionándome con su cuerpo dijo: ya no luches que no te vas a escapar, mejor coopera o al que le va doler más es a ti...
JM: por favor se lo suplico déjeme ir... yo no le hice nada...
Mis lágrimas lejos de conmover al miserable lo divertían aún más...
Diablo: jajajaja... me encantan cuando lloran y suplican... si ya hasta debes tener el culo mojado de la excitación, ustedes para eso son, para dar placer a los machos...
Y el Diablo empezó a romper mi ropa... yo forcejeaba intentando salvar mi pureza pero su fuerza era mucho mayor...
Pataleando gritaba: nooooo, por favor nooooo
Diablo: ya me hartaron tus gritos...
Y sacando un pañuelo de su bolsillo, el Diablo metió esa prenda en mi boca impidiéndome seguir gritando... acto seguido, el delincuente me despojó de toda la ropa dejándome desnudo... por primera vez en mi vida un hombre veía mi cuerpo totalmente desnudo mostrando una figura única y seductora...
Diablo: eres un bombón delicioso... espero ser yo el que te estrene...
Con mis ojos llenos de lágrimas vi como el Diablo se chupó el dedo de en medio de su mano derecha y luego de abrir mis piernas lo introdujo en mi agujerito...
Diablo: vamos a ver si alguien ya te la metió...
Comencé a retorcerme al sentir como ese dedo ingresaba en mi intimidad invadiendo lo más íntimo de mi ser...
JM: mghmghmghhhhh....
Con el rostro lleno de sadismo, el Diablo introducía con esfuerzo su dedo notando que mi agujero estaba estrecho y cien por ciento cerrado...
Diablo: virgencito como me gustan... qué bien me la voy a pasar...
Y el Diablo sacó su dedo para incorporarse y quitarse el pantalón y la trusa dejando ver su enorme verga que ya estaba erecta y con líquido preseminal...
Diablo: mira bien lo que te va entrar putito... a partir de hoy vas a quedar bien abierto...
Lleno de terror vi el miembro de ese hombre... era la primera vez que veía uno de ese tamaño, era enorme, estaba seguro que no cabría en mí y si lo hacía terminaría desgarrándome...
Diablo: debes pensar cómo te va caber todo pero aunque te duela te voy a meter hasta los huevos, jajajaja
El Diablo se colocó entre mis piernas, se las echó al hombro dejando expuesto mi agujero mientras que yo me revolvía como último intento para salvarme...
Diablo: una lindura como tú debe tener dueño, pero pues ya no tendrás más porque seguramente te va despreciar cuando sepa que fuiste violado, quién va querer a alguien que ya fue usado por otro...
La verga del Diablo se puso en la entrada de mi canal y con un empujón empezó a meter la cabeza de su miembro...
JM: aghhhhhhhhhmghhhhhhh.....

El dolor que sentí fue indescriptible.... la cabeza de la verga de mi violador era muy grande y mi agujero muy cerrado... el Diablo notó que mi entrada oponía resistencia y él presionó aún más...
DIablo: estás bien cerrado, esto me encanta....
Y con un movimiento duro de caderas, el Diablo empujó y la cabeza de su miembro finalmente ingresó en mi culo provocando que diera un grito callado por el pañuelo mientras sentía cómo mi entrada era desgarrada por ese intruso...
Diablo: ya te enterré la cabeza, falta todo lo demás...
Yo lloraba sin poder creer lo que estaba viviendo... yo no merecía algo así... ser violado en un sucio cuchitril, siendo usado como una puta cuando en realidad estaba entregando mi mayor tesoro a un desconocido, mi virginidad...
En mi mente recordaba las palabras de la gente de mi pueblo, que las chicas deben de ser decentes y guardarse para su esposo pues una mujer marcada por otro ya no puede aspirar a nada...
El perverso hombre siguió introduciendo su verga en mi interior hasta que sus huevos chocaron con mis nalgas... en ese momento, me sentía partido en dos con un dolor tanto en mi cuerpo como en el alma...
Diablo: ya te tengo bien clavado... ya no eres virgen chiquito... yo me robé tu maravilloso tesoro, jajajaja...
Y el despiadado hombre sacó de golpe su verga provocándome otro dolor... al sacarla vi su miembro lleno de sangre, líquido que también escurría por mis nalgas... me había desflorado cruelmente...
El Diablo no esperó más y me enterró su verga nuevamente sin el menor remordimiento dando inicio al mete y saca... al tiempo de quitarse completamente su camisa para quedarse completamente desnudo y disfrutar más de mi cuerpo...
Las manos del Diablo comenzaron a recorrer cada centímetro de mí y con sus labios besaba mis tetillas y mordía mi cuello dejándome marcas mientras yo sollozaba en silencio...
Diablo: qué rico estás... sabes a limpio, a carne fresca, eres de lo mejor que me he comido...
Yo me sentía asqueado al ver cómo el hombre se relamía lleno de lujuria mirándome fijamente a los ojos al tiempo de sentir en mi interior su verga saliendo y entrando hasta lo más profundo de mi ser... sentía que en ese momento le pertenecía al violador pues estábamos unidos por nuestras intimidades... las estocadas eran cada vez más violentas y levantaban mi frágil cuerpo...
Diablo: querías ser mujer, pues aguántate como una hembra...

En ese instante entendí lo difícil que es nacer mujer, aunque físicamente no lo era estaba sufriendo una cruel violación, la cual aunque odiaba, mi naturaleza humana hizo que me excitara, algo que fue percibido por el Diablo...
Diablo: ja ya te está gustando porque tu culo ya se abre más para recibir mi verga, jajajajaja
Sintiéndome más humillado, comencé a rasguñar los brazos del hombre quien al sentirlo aceleró aún más sus embestidas...
Diablo: te lo haré más duro para que entiendas que tienes que respetar a tu macho... tú sólo eres un putito, sólo eso...
Paf paf paf, se escuchaba en el lugar, era el sonido de dos cuerpos chocando, el de un hombre de casi 20 años experimentado en el sexo, y el de un adolescente siendo iniciado en el sexo por un salvaje que no valoraba mi virginidad...
El dolor me hizo escupir el pañuelo y gemí fuertemente ante cada estocada....
JM: ah ah ah ah ah ah ah...
Diablo: gimes como una puta y tu culo me aprieta chingón...
Yo lloraba y gemía al escucharlo...
Diablo: siempre me recordarás a mí, al macho que te rompió por primera vez, jajajaja... yo tampoco me olvidaré de ti porque eres por mucho el mejor culo que me he chingado, delicioso y virgen....
El Diablo me besó sintiendo inesperadamente la lengua de mi violador introduciéndose en mi cavidad bucal...

...no pude evitar comparar el beso suave y dulce de Arturo con este beso con sabor a tabaco y alcohol...
Faltándome el aire, sentí como la verga del Diablo se engrosaba en mi interior y este liberó mis labios para la lanzar un gemido de semental bravío.... Ahhhhhgggggghhhhhh....
Con el rostro desfigurado de placer, el Diablo inyectó su simiente en mi interior... yo sentía un líquido caliente ingresando en mis órganos internos... el semen del macho estaba fertilizando mi cuerpo recién desflorado... grandes cantidades de leche eran depositadas en mí...
El Diablo dejó caer todo su peso sobre mí, que con las piernas abiertas y el culo adolorido sentía a mi violador resoplándome encima con su cuerpo sudoroso...
Pasado unos minutos, el Diablo salió de mi interior provocándome un dolor más... vi cómo con una sonrisa cínica observó mi culo roto y ensangrentado...
Desnudo, se fue a una esquina del lugar y se limpió la verga ensangrentada con un pañuelo al tiempo de orinar...
Con la mirada perdida, veía el fuerte chorro que salía de la verga del Diablo que en reposo se veía enorme y seguía sin entender cómo todo eso entró dentro de mí...

El Diablo sacudió su verga y se vistió rápidamente...
Diablo: ya estoy bien desfogado, me siento como nuevo, ahora tengo hambre iré a conseguir algo... nos vemos primor, eres una ricura... quizás nos volvamos a encontrar y si no pues estoy seguro que no me olvidarás, jajajajaja...
El Diablo salió de la casa en construcción mientras yo intenté levantarme, pero no pude por el dolor en mi culo que lucía muy abierto y con sangre y semen saliendo... sólo pude tomar mi ropa y hacerme un ovillo en la esquina del sucio lugar mientras lloraba desconsoladamente...
A mi mente llegó la imagen de Arturo y sus últimas palabras "espérame por favor"... no pude hacerlo... el destino me jugó una mala broma y ahora estaba tirado en el suelo desvirgado por un desgraciado que desconocía...
Yo no sabía lo que me esperaba, ni siquiera sabía que la semilla del Diablo ya había sido sembrada en mi interior y muy pronto germinaría...